La cantautora escocesa Nina Nesbitt compartió una versión acústica de 'On The Run' desde un rincón tranquilo frente a una casa de montaña, sentada en el suelo, guitarra en mano y con un perro como único testigo cercano. Sin escenografía ni artificios, la artista escocesa apuesta por una entrega simple y directa, alineada con el tono honesto de su nueva etapa musical.

Esta historia forma parte de Mountain Music, su cuarto álbum de estudio, y esta interpretación se enmarca dentro de la serie At Home In The Mountains, donde Nina graba sesiones en entornos naturales, conectando con una estética más folk y personal.
 

En 'On The Run', la letra habla de escapar. De dejar una vida demasiado rígida, de empacar antes del amanecer y perderse por caminos largos, sin mirar atrás. La escena no tiene grandes movimientos, pero todo está en los detalles: el sonido de la madera, el paisaje que asoma al fondo y ese aire de despedida que atraviesa cada verso.

'Tryna hold it down just ain't no fun', canta, mientras invita —en la segunda parte— a otra persona a sumarse a esa fuga: leer, escribir, manejar sin rumbo, enviar una postal desde el norte. La canción no habla solo de irse; habla de vivir.

Esta versión aporta una nueva lectura del tema, más serena y conectada con lo cotidiano. Y funciona también como una postal sincera de su presente artístico.