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Ashley McBryde, la artista country que se forjó tocando en bares de ruta en zonas rurales, presentó una versión acústica de “Rattlesnake Preacher”, una canción escrita por Randall Clay. Este tema, que los fans han coreado en sus conciertos durante años, ahora cobra vida en una grabación íntima que refleja el estilo crudo y personal de McBryde.
“Rattlesnake Preacher” cuenta la historia de un predicador del sur de Alabama, un hombre de fe que maneja serpientes y enfrenta el pecado con una mezcla de devoción y fuego, como dice la letra: “My daddy was a rattlesnake preacher / My daddy was a man of God”. La canción retrata un legado familiar donde el narrador recuerda a su padre, un predicador apasionado que le enseñó a “ahuyentar al diablo” con la misma intensidad. Las imágenes de fuego, azufre y un toque de licor en el aliento pintan un retrato vívido de un personaje complejo, marcado por las tradiciones sureñas de Estados Unidos.
En esta versión acústica, McBryde aparece sola frente a un micrófono, en una habitación oscura iluminada solo por la luz natural que entra desde el exterior, con tres ventanas como único fondo. Acompañada únicamente por su guitarra, ofrece una interpretación que resalta la fuerza de la letra y su conexión personal con la historia. “Esta canción es especial porque viene de Randall y porque los fans no han parado de pedírmela”, compartió McBryde en redes sociales. “Es una manera de honrarlo y de contar una historia que siento cerca”.
La canción también conecta con su trayectoria personal. McBryde creció en Arkansas en un hogar donde la fe tenía un rol central. Aunque su padre no manejaba serpientes, su figura como predicador influyó en su música y sensibilidad narrativa.
Desde su debut con Girl Going Nowhere en 2018, McBryde ha sido reconocida por medios como The New York Times, NPR y Rolling Stone. Ese álbum le valió una nominación al GRAMMY como Mejor Álbum Country, y premios como Nueva Artista Femenina en los ACM y Artista Revelación en los CMT. Su sencillo “Girl Goin’ Nowhere” también fue nominado a Mejor Canción Country y Mejor Interpretación Solista Country en los GRAMMY 2020.
Su segundo disco, Never Will (2020), producido por Jay Joyce, consolidó su estilo, combinando rock de estadio con toques de bluegrass y narrativa country. Fue el único álbum nominado como Mejor Álbum Country en los GRAMMY, ACM y CMA en la misma temporada. El sencillo “One Night Standards” fue certificado platino por la RIAA y destacado por NPR entre lo mejor de 2019. Además, su dueto con Carly Pearce, “Never Wanted To Be That Girl”, logró entrar al Top 20 en las radios country.
Actualmente, McBryde sigue de gira por Estados Unidos con paradas en festivales como Country Thunder y WE Fest. El estreno de “Rattlesnake Preacher (Acoustic)” coincidió con su actuación en el CMA Fest 2025, donde se presentó en el Nissan Stadium. Para celebrar el lanzamiento, invitó a sus fans a tatuarse diseños inspirados en la canción durante el Día Nacional del Tatuaje, con premios como entradas para sus shows.
Con “Rattlesnake Preacher”, McBryde vuelve a destacar su estilo narrativo y su capacidad para conectar con historias profundamente arraigadas en el sur, reafirmando su lugar como una de las voces más reconocidas del country actual.