Un clip centrado en la familia que presenta a las esposas de Brian Kelley y Tyler Hubbard, junto con otros miembros de sus familias. Filmado en Florida y Nashville, junto con escenas en el Parque Estatal Lost Dutchman de Arizona, el clip muestra un lado más reservado y contemplativo del dúo. La canción la podes encontrar en su último álbum, Can't Say I Ain't Country.